Estamos en tiempos de
reconversión de los grandes temas de nuestra civilización.
Sucede en todos los ámbitos y
debemos de adaptarnos para seguir progresando en nuestra vida en común.
Tenemos grandes retos, tanto en
la educación, como en lo concerniente en la forma de dotarnos de estructuras
solidas que nos hagan avanzar al ritmo de los demás países de nuestro entorno.
Nos lo pide la inmensa mayoría de
conciudadanos que están cansados de ver, a lo largo de los últimos casi
cuarenta años de democracia, que no nos beneficia en nada todo lo establecido y
la forma en que se desarrolla nuestra convivencia social.
Es urgente que todos los
estamentos de nuestra democracia tomen de una vez conciencia de que algo no
funciona en nuestro sistema. Y primordialmente, que tomen conciencia nuestros
ciudadanos y nuestros políticos.
No podemos esperar que todo se
arreglará por si solo sin hacer nada nosotros.
Nuestra civilización está llena
de casos en que una forma de llevar una nación logra grandes e importantes
avances. Pero también esta llena de casos en que otra forma de llevar una misma
nación ha creado un caos que hunde a la nación de que se trate.
Algo de este último caso está
sucediendo en nuestro país.
Las buenas formas de superar a
una dictadura se han convertido en algo peor : Una desmembración de nuestra
nación. Una galopante corrupción en todos las instituciones y en los partidos
políticos en particular.
No podemos creer que son casos
aislados todo lo que está sucediendo un día sí y otro también.
Tenemos la corrupción enquistada
en nuestras clases dirigentes y no podremos superar la miserable crisis, tanto
económica como política o sindical, hasta que los ciudadanos no tomemos
conciencia del desastre a que nos ha llevado esta corrupción generalizada.
Tenemos un grave problema y solo
podemos resolverlo con una gran fuerza de voluntad por parte de todos.
Nuestros representantes, nuestros
empresarios, nuestros banqueros, nuestros trabajadores, nuestros pensionistas,
nuestros enfermos, nuestros estudiantes ( En fin : Todos nosotros sin
excepción), debemos de ponernos a trabajar para que esta corrupción no vaya a
más y sea eliminada de la forma que se está practicando con total obscenidad.
No puede ser que nuestra economía
este constantemente esquilmada por los corruptos. Deben de ser juzgados con
todo el peso de la Ley y condenados a penas muy ejemplerizantes.
No es posible que todos los
corruptos vuelvan a estar libres cada vez y que nos sigan robando.
Un político corrupto ha de ser apartado
automáticamente de todo cargo y no poder volver a ocupar ningún cargo ni
siquiera poder presentarse a unas elecciones.
Pero como esto no está legislado,
los mismos políticos no quieren hecer leyes que les perjudiquen cuando se
descubra su corrupción.
Todos cobran por lo más
variopinto.
Cobran por ser algo en la
política.
Cobran por hacer o dejar de hacer
algo.
Cobran por asistir a alguna
reunión.
Cobran sueldos y sistencias,
cobran por dietas, por viajes todo pagado, por pertenecer a cada una de las
instituciones a las que ellos mismos se nombran.
No les sirve de nada las normas
de incompatibilidades existentes. Siempre saben como sortearlas y cobrar por
todos los cargos y representaciones a que acceden.
Porqué debemos de pagarles tanto
y además que nos esquilmen con los casos de corrupción, de favoritismos, de
prevaricación, de usar y abusar de su poder, etc., etc. ¿?
No podemos seguir como estamos.
Se ha de hacer una reconversión
de los políticos para que se frene este desmadre tan continuado que ha
existido, existe y posiblemente, existirá, si no le ponemos freno.
Pero claro. Que pasa. : Nadie
puede hacer nada para cambiarlo. Son los propios políticos que se han de poner
de acuerdo para hacerse el harakiri político. No lo harán. No les interesa. No
les importa la miseria a que nos ha conducido este malévolo proceder de ellos
mismos.
Es indignante cuando un político
da como escusa que están muy mal pagados.
Qué quieren ¿?
Que aun puedan cobrar más ¿?
Pero qué relación hay entre un
trabajador normal que cobro menos de 1.000 euros al mes y el sueldo de un
político ¿?
Y la relación entre lo que cobra
(En promedio ) un pensionista que ha trabajado toda su vida y ha cotizado y
pagado todos los impuestos, para al final le paguen alrededor de 800 euros al mes, con
un político que con haber trabajado solo ocho años ya cobra el máximo de
pensión.
Tenemos casos de políticos que
cobran más de 150.000 euros anuales.
Pero nunca nos dicen cuales son
los ingresos promedios de los políticos en general.
Les da vergüenza. A p’esar de que
son unos sinvergüenzas.
Unos dicen lo que se embolsan al
año oficialmente, pero se dejan en el tintero todo lo que cobran de otras
formas que no tienen que hacerlo constar en sus declaraciones de renta, por
estar exentos de ello en virtud de propias leyes que han ido promulgando ellos
mismos. Al margen de lo que cobran como cosa que no quieren por sus
corrupciones. Pero que se forran.
Sin embargo, a los trabajadores
es obligatorio que todo lo que cobren esté sujeto a impuestos.
No sabemos porque cuando se sabe
de alguien que ha hecho algo malo y se ha enriquecido en forma fraudolenta no
se le mete en la cárcel ¿?
Es que los jueces no son capaces
de hacer cumplir las leyes de antifraude y enriquecimiento anómalo y
delincuente ¿?
Si todos estos años de democracia
se hubieran perseguido estas prácticas corruptas, no habríamos llegado al
extremo en que nos encontramos.
No estamos hablando de unos pocos
millones de euros. Estamos hablando de que el enriquecimiento de unos pocos han
socavado la vida de todos.
Las deudas públicas se han
disparado por el robo sistemático de la fortuna pagada con nuestros impuestos.
De no haberse apropiado del
dinero público todos los políticos y sindicalistas hoy no se debería la
mareante cifra de casi un millón de millones de euros.
Ni habrían los casi seis millones de
trabajadores sin empleo. Ni se habrían cerrado las más de 400.000 empresas. Ni
habrían existido los desahucios continuados y brutales que estamos padeciendo
nuestra pobre población.
No tendríamos el creciente
peligro de asaltos a nuestros hogares, a nuestras personas, las malas artes de
la delincuencia organizada que nos atemoriza cada vez más.
Es escandaloso descubrir que
mientras tenemos tantos problemas y peligros de ser maltratados, asesinados y
torturados, los políticos están enzarzados en el “Y tú más”. Es indignante y
merecemos que nos defiendan en lugar de someternos a este sufrimiento.
Reconvertirse pues los políticos
para mejorar y caminar hacia la resolución de los problemas acuciantes que nos
atosigan. Que se dejen de sus batallitas y trabajen para los ciudadanos. Que
para ello cobran grandes fortunas unos y grandes sueldos otros.
Y lo que deberían de hacer ya es
devolver todo lo que se han embolsado de forma fraudolenta y sin vergüenza alguna.
El abuelo cabreado
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