IMPORTAMOS POCO LOS CIUDADANOS

Ayer leí una revista que no me había interesado hasta hoy.

Se llama LA AVENTURA DE LA HISTORIA.

En su número 173 nos habla de reyes, nobles, políticos, banqueros … con el título muy atrayente de : Los 25 españoles más corruptos de Hispania a hoy.

Se inicia con Audax, Ditalcos y Minuros, los asesinos de Viriato en el puesto número uno y termina con Luis Roldan, el director de la guardia civil que se apropió de fondos reservados y de las pensiones de las viudas de los guardias civiles, en el puesto número 25.

Como es comprensible ni están todos los que han sido, ni todos los que han sido estarán nunca en una tan corta relación.

Si quisiéramos tener a todos los españoles corruptos de todas las épocas tendríamos una Enciclopedia de corruptos inmensa, con miles de volúmenes y aun nos quedaríamos cortos.

Solamente con los corruptos de los últimos casi cuarenta años de nuestra mal llamada democracia, ya llenaríamos una biblioteca entera.

Siempre hemos sabido que la corrupción es una tentación tan fuerte que pocos individuos inteligentes le hacen frente y la combaten. No es rentable combatirla. Es mucho más rentable acogerse a sus beneficios económicos y de poder político.

Si la política sirviera a los ciudadanos otro gallo nos cantaría.

Es imposible conseguir políticos íntegros. Todos los que se meten en la política o son corruptos o se corrompen con el tiempo. Los demás políticos les hacen la vida imposible si combaten la corrupción generalizada de los que ya están corruptos.

Los ciudadanos padecemos esta triste tendencia de las personas que nos engañan con sus buenas palabras para conseguir que les votemos. En cuanto han conseguido nuestro voto todo se transforma, como un endemoniado que se hubiera disfrazado de oveja y en realidad es un lobo feroz, al estilo de la Caperucita Rija, el lobo y la abuelita.

La desgracia nuestra es que nosotros somos la abuelita, los políticos el lobo y nosotros tenemos la inocencia de la Caperucita. Nos lo creemos todo. Somos imbéciles y los políticos lo saben. Nos dan gato por liebre y ya no podemos sacarlos de sus poltronas, sus escandalosos sueldos, sus escandalosos palacios, sus escandalosas  formas de apropiarse de nuestro trabajo, de nuestros ahorros, de nuestras vidas, de nuestras ilusiones, de nuestras ideas, de nuestros grandes ideales, para así poder mangonearnos a su antojo y con total impunidad.

Les importamos nosotros los ciudadanos ¿?

No creo que les importemos.

Si les importáramos estaríamos mucho más respetados por los políticos.

Todo conduce a que no les importamos un bledo, ni nuestra vida,  nuestros sufrimientos. Ellos lo tienen todo y lo usan y abusan de ello. Nosotros no tenemos nada. Ni lo podremos llegar a tener. Salvo que nos corrompamos y nos metamos en la política como hicieron ellos.

Si algún político tiene un destello de sinceridad y nos da la razón durante un instante, inmediatamente se reviste de la coraza de acero inoxidable y plomo para que no le entre en el corazón un poco de humildad y nos dé una vida un poco más agradable.

Nos tratan siempre con un desdén inmenso. Creen que ser amables con quienes les pagan sus sueldos, sus casas, sus viajes todo gratis, sus dietas y sus caprichos, no es de recibo. Nada nos deben. Siempre se sacrifican por nosotros que les hemos votado y los hemos puesto en los altares de la cosa pública. Nosotros somos la escoria a la que deben de apalear, menospreciar y hundir en el fango.

No hay correspondencia entre lo que hacen por nosotros y lo que consiguen con su actividad dentro de la política. La relación entre ambos está entre uno que a nosotros nos dan y los millones que ellos consiguen con nuestros votos. No hay una proporción lógica.

Nunca lograremos sacarnos de encima esta mugre. Por más que nos rasquemos la escoria que nos echan constantemente encima para que no nos levantemos y los saquemos de sus poltronas tan bien remuneradas. Encima dicen que cobran poco.!! Venga ya!!. Que descaro.

Que cara más dura tienen todos ellos.

Siempre saben cómo largarse de la política con los bolsillos llenos de dinero y poder, saliéndose por la tangente y no teniendo miedo a nada. Nadie les podrá acusar de nada, por malo y desgraciado que haya sido su proceder. Nunca podremos llevarlos ante la justicia. Suerte que hay una justicia divina que a todos nos llega. También les llegará a ellos y no podrán comprar la sentencia como ocurre en la tierra.

Tenemos un caso muy reciente : El de Hugo Chávez en Venezuela.

Ojalá a todos los políticos corruptos y déspotas les ocurra el mismo final que a él.

Mi pregunta más importante es porqué si hay buenas personas en nuestro mundo los políticos no son buenas personas ¿?

Estamos en una pendiente por la que se está deslizando nuestra convivencia. No hay freno alguno que les haga ver que si todo se destruye ellos tampoco se salvarán.

Cuando algo está fallando tan estrepitosamente, como es nuestra clase política, algo se ha ce hacer para rectificar.

No podemos morirnos de no hacer nada.

O ellos se ponen manos a la obra y rectifican, sacándose de encima a los corruptos, o los ciudadanos deberemos de pensar en algo para cambiarles cuanto antes. Es imposible seguir viendo día a día la actual degradación de nuestra clase política.

Estamos en una encrucijada : O ellos o nosotros.

Cuando les vemos en la televisión o en los periódicos parece siempre que no hayan roto nunca un plato. Son todos beatíficos. Parecen salir de los altares para mejorarnos la vida a todos.

Pero la realidad es muy distinta.

Se pelean entre ellos, no para mejorar nuestra convivencia, nuestra vida, nuestro trabajo, nuestros ahorros, nuestra educación, etc., etc. Solo se pelean para asegurarse su futuro.

Cuando uno tiene el poder, el otro ha de hacer y deshacer todo lo que se le ocurra para lograr sacarle del poder y encaramarse él a su poltrona.

Y todo lo hacen por nosotros. Pobrecillos. Que incomprendidos que son.

Yo solo sé que cada vez se inventan nuevos impuestos, nuevas tasas, nuevas formas de robarnos más y más. No les importa que ya no podamos con nuestra alma. Ellos deben de seguir robándonos para tener impresionantes sueldos ypoder.

Porqué no dejan de gastar las cantidades escandalosas que cada vez son más elevadas ¿?

Porqué no se aprietan el cinturón ellos ¿?

Porqué debemos de morirnos nosotros para que ellos puedan vivir tan ricamente ¿?

Porqué no renuncian a la infinidad de cargos, carguetes y presidencias, en los que cobran por cada uno y sin nada que hacer.

Asisten y no hacen nada pero cobrar sí que cobran.

Es todo un escándalo. Se mire por donde se mire todo es corrupción.

En los presupuestos generales del estado que cada año nos presentan, siempre se remueven las cifras, pero de un sitio sacan y en otro meten mucho más gasto. La consecuencia es que siempre necesitan esquilmarnos más a los ciudadanos y que no podemos protestar ni cambiar nada. Debemos de seguir pagando con nuestros magros sueldos, misérrimas pensiones y con nuestra miserable forma de mantenernos vivos.

Que rebajen de una vez todos los gastos del estado y nos dejen de robarnos nuestros sueldos, pensiones y exiguos ahorros, que cada vez es más misérrimos.

Si la gente normal de nuestro país no puede casi ni vivir dignamente. Porqué ellos viven tan opíparamente ¿?

Gastan y gastan sin freno y nos hacen más pobres cada día a quienes les sustentan con los impuestos casi confiscatorios a que nos tienen sometidos.

Veremos si algún día podemos visualizar el milagro que todos estamos esperando : Unos políticos que realmente estén al servicio de los ciudadanos y no al revés como nos está pasando desde hace casi cuarenta años, pero con mayor virulencia desde hace una década.

Es triste ver que no hemos aprendido nada del siglo pasado.

No hemos aprendido  que los políticos no son buenas personas. Solo quieren su bien, a los demás ya nos pueden dar por …

Nuestros descendientes están noqueados. Sin trabajo, sin educación, sin sanidad, sin posibilidad de poderse jubilar cuando les llegue la edad ( Hasta hace poco era a los 65 años. Ahora será a los 67 años y la tendencia es de seguir subiendo la edad de jubilación), sin vivienda digna en muchísimos casos por los desahucios, y un lago etc., etc.

Que les queda para poder vivir en este país ¿?

Cada vez hay más de nuestros jóvenes que deben de emigrar a otros países para poder sobrevivir a nuestro desastre.

Qué futuro tienen en nuestro país ¿?

Dicen que no hay nada que cien años dure.

Lógicamente, dentro de cien años todo será distinto y posiblemente les parecerá extraño que a nuestra generación de abuelos estuviera ocurriendo el desastre actual. Los jóvenes les explicarán que todo fue debido a una clase política que solo pensaban en ellos mismos, en lugar de pensar en todos los habitantes de nuestro país.

 

El abuelo cabreado