El proceso universal es
inexorable. Después de una noche tenebrosa le sigue ( A veces. Claro está) un
día luminoso. Esplendido. Con mayores ganas de ser un habitante de nuestro
mundo llamado Tierra.
Desde hace una década que no nos
motiva prioritariamente el ser un habitante de nuestro país, nación, o cosa,
como se le quiera llamar por parte de nuestros malos políticos.
No tenemos identidad.
Somos habitantes de un mundo
irreal.
Tenemos más de zombis que de
humanos.
Somos la última escoria del mundo
civilizado y aun sobrevivimos.
No es maravilloso que pese al
empeño de nuestros representantes políticos, aun consigamos ser seres vivientes
racionales y con expectativas de futuro ¿?
Todos nos quieren anular.
Destruir. Darnos por finiquitados.
Pero somos tan tozudos que no nos
avenimos a quedar como estatuas de sal.
Queremos nuestra participación en
la vida en común.
Queremos que nos entiendan y no
que tengamos que entenderles nosotros a ellos.
Queremos ser seres humanos con todas
las consecuencias. Sin que nos dirijan. Sin que nos manden. Sin que nos presten
la vida que ellos quieren hacernos vivir.
Es mucho más sencillo de lo que
ellos creen.
Si nos dejan vivir lo
comprobarán.
No podemos estar siempre bajo la
bota del que dice ser nuestro representante y que solo piensa en si mismo y de
todos los suyos.
Somos millones de personas y
ellos solo son una ínfima parte del total. Sin embargo nos mandan y nos dicen
que debemos hacer. Que debemos no hacer. Como debemos de comportarnos y como
debemos de no comportarnos.
Ya está bien de sus imposiciones
y de sus consejos que no solucionan nada.
Cada vez más los políticos, los
que centran su vida en vivir a costa de los demás. Están sin horizontes claros.
Unos piden más poder. Otros más democrácia.
Otros más y mejores sueldos. Otros que no les persigamos por sus fechorías.
Otros que les dejemos hacer y deshacer para su provecho.
Pero todos en general, lo que
desean y lo piden a gritos, que les dejemos vivir como siempre, a costa de los
sufridos conciudadanos que les pagan todos sus sueldos, prevendas, millonarias
pensiones, reconfortantes bagatelas que les hinchan de orgullo y satisfacción.
Les suena esto ¿?
Siempre es más de lo mismo. Se llame
más o se llame menos. El nombre es lo de menos o lo de más. Lo entienden todos.
No. ¿? Creo que sí que lo entienden. Lo entendemos todos sin necesidad de Más.
Volviendo al tema principal de
este escrito : Después de una noche invernal, oscura, terrible, intranquila y maldita, de malos augurios, de desastres
infinitos, etc., etc., siempre amanece un nuevo día. Y quizás mucho más
luminoso.
Lo malo es que las noches negras
y terribles son mayoría. Los días luminosos son más bien pocos.
Es lo que nos está pasando desde
hace más de una década.
Hace dos décadas todo era
maravilloso. Luego se troncó en una década terrible. Terrible y que nos está
sepultando a todos en el agujero negro del cosmos interestelar.
Hemos dejado de ser una nación.
Hemos dejado de ser un país. Hemos dejado de ser habitantes terráqueos. Solo
somos del país, la nación, la cosa, de nadie.
No somos nada en el concierto
mundial. Somos la escoria a eliminar.
Éramos una potencia entre las
potencias europeas. Nos hemos convertido en uno de los envases desechables de
Europa.
No nos quiere nadie. No nos
quieren ni ver. Somos el mal fario de los países europeos.
No tenemos futuro.
Estamos adormilados y nos están
echando éter continuamente para que sigamos en el sueño de los justos ( O más
bien en el sueño de los injustamente tratados).
Lo veo cada día en el entorno más
cercano : Nadie piensa en que es posible otra forma de vivir.
En vivir con nosotros mismos.
En vivir porque no vivo. Como
dijo en sus poemas Santa Teresa de Jesús, hace cientos de años.
Tenemos que levantarnos los de
siempre. Los aflijidos . Los
desesperados. Los deshauciados. Los pobres de espíritu. Los que sufren
persecución por la justicia de los hombres. Los que sueñan con una vida mejor.
Los que son buenas personas. Los que padecen hambre y sed de justicia. Los que
desean ser seres humanos libres y sin que les aten a las galeras, como sucedia
en la antigua Roma, Grecia, o grandes imperios de la antigüedad.
Si no somos nosotros mismos, los
que nos mandan y dirigen nunca nos arreglarán las cosas cotidianas, como el
comer, el vestir, la educación, la medicina, la vivienda digna, el trabajo
digno, el ser en definitiva un ser humano completo.
Cada día sabes más de lo que nos
roban y estafan.
Porqué un pobre personaje que ha
sido trabajador toda la vida por cuenta ajena no percibe nada cuando deja de
trabajar y si cobran muchísimo dinero los que mangonean todos los temas ¿?
Que han hecho ellos que no
hubiera hecho ya el pobre trabajador en su vida de trabajo ¿?
Es que un año de alguien que está
metido en la política vale mucho más que cuarenta años de una trabajador normal
que no está metido en la política ¿?
Según la mente de nuestros
dirigentes políticos, de todos los tiempos, perece que sí. Un año de ellos es
más importante que cuarenta años dando el callo para que ellos se enriquezcan
sin límite alguno.
Y cuando se retiren les pagaremos
más de lo que podían esperar en sus tareas de asesoramiento y control de la
masa imbécil que les aúpa al poder.
Todos los currantes normales se
van al estado de jubilación con lo puesto. Los políticos y sus acólitos no.
Todos ellos tienen mejores sueldos y pensiones para que vivan eternamente como
dioses. Solo les falta la pirámide y que les entierren con sus tesoros, sus
sirvientes, sus comidas y sus animales, para que puedan pasar en la barca de caraónte
al mundo de los muertos lo mejor posible.
Siempre ha sido así.
No nos podemos extrañar.
Quien ha conseguido someter a los
demás conciudadanos a su libre albedrio y decisión está capacitado para ser un
dios y conseguir sobresalir de la gran masa de imbéciles que le han ascendido a
su poder.
Pero no todo es penumbra.
Siempre hay un destello de
esperanza.
Después de un largo periodo de
negrura, se empieza a ver una ténue luz al final del túnel.
Quizás esta luz sea la que ven
los moribundos cuando se acerca la parca a llevárselos al mundo de los muertos.
Pero al menos es una luz de esperanza para los desheredados de la tierra
nuestra llamada … No sé cómo llamarla ya
: Quizás mejor decir la tierra X, o tierra prometida a los desplazados de todo
el mundo. En todas las épocas ha habido desplazados. Unas veces forzados y
otras veces casi libres. Hoy los desplazados son mayoría y esperan encontrar lo
que les han negado aquí. No tienen vida aquí. Han de buscarla en otras
latitudes. Como hacían nuestros abuelos y nuestros padres. Hoy nuestros hijos y
nuestros nietos deben de volver a hacerlo si quieren sobrevivir.
Ah. Pero a los políticos, a sus familiares,
a sus amigos y a sus seguidores, que nos les angustie nada de todo esto. Todos
tienen un buen caldo para calentarse en invierno y unas buenas vacaciones en verano.
O al revés. No padecen ni tienen que sobrevivir con 600 euros al mes.
Cobran millones de euros y aun
cobrarán más cuando todos los pensionistas hayamos desaparecido de la faz de la
tierra, al morir por pobreza extrema y
falta de sustento, sin vivienda, ni un techo para guarecerse de la lluvia y mal
tiempo invernal.
Llevamos una década nefasta para
nuestra generación.
No contamos para nada más que
para sacarnos la foto y desear que a ellos no les pase lo mismo que a nosotros.
Solo cuentan con nosotros para
que les sigamos votando. Una mierda. Yo no les voto desde hace muchos años. Ni les
pienso votar más. Solo si rectifican y hacen algo por los ciudadanos de nuestro
país, solo si dejan de robarnos, estafarnos y vivir a costa nuestra. Todos los
impuestos que pagamos solo sirven para que ellos vivan muy bien. A nosotros nos
masacran a impuestos y nos ahogan sin misericordia alguna.
Haber trabajado entre cuarenta y
cincuenta años y pagando nuestros impuestos y nuestra seguridad social, no es
nada para ellos.
Muchos políticos tienen todos los
sueldos y las pensiones por haberse dedicado unos años a la política. Nosotros
por habernos dedicado toda la vida a trabajar no somos merecedores de nada.
No hay dinero (Dicen), para pagar
las pensiones a los trabajadores que trabajaron muchísimos años pagando sus
cotizaciones para que cobraran los pensionistas de los últimos 60 años.
Ahora ya no queda dinero para
pagarnos a nosotros.
Casi debemos de agradecer que nos
sigan pagando la miseria que nos pagan y que les besemos los pies. Que se los
lavemos como hizo la María Magdalena con Jesús ¿?
Debemos de ser buenas personas
mientras vemos que nos están jodiendo vivos.
Pero todo tiene un final.
Al final veremos la luz.
Veremos que nuestros
representantes nos quieren y nos darán el maná divino para que no nos muramos
de hambre.
Suerte que el ser humano es
finito y espero que pronto vayan desfilando al cementerio todos los que nos han estado robando y
estafando tan claramente desde hace casi cuarenta años.
Dentro de poco espero que cambie
la tortilla. Desaparezcan todos los que han estado en el mundo de la política
desde antes del inicio de nuestra actual democracia (Ya que por su propio pie
no se quieren ir. Dejando espacio a las nuevas generaciones).
Entonces. Y solo entonces,
podremos ver la luz al final del túnel.
Se iniciará, antes o después, una
nueva época de prosperidad. Se crearán millones de puestos de trabajo por las
miles o millones de empresas creadas por nuevos empresarios emprendedores y con
la creación de pimes y autónomos saldremos de la crisis en que nos han metido
los políticos corruptos de estos años miserables padecidos, por todos y
propiciados solo por unos pocos.
No serán los políticos los que
nos den una nueva época de prosperidad y de gran crecimiento. Serán los
emprendedores. Gente normal de la calle sin conexión alguna con los políticos
los que nos arreglarán la vida a todos.
Nuestros hijos y nuestros nietos
están abocados a la miseria en las actuales circunstancias.
Nuestros hijos y nuestros nietos
saldrán por si mismos de la miseria.
Pero si los políticos se empeñan
en robarles todo su trabajo seguirán en la miseria de sus padres y abuelos.
Porqué todos los dioses del
Olimpo y del Cosmos no ponen remedio al desmedido proceso de robo que tienen
todos los políticos establecido como una virtud, ya que les permite vivir a
costa de todos muy ricamente ¿?
Si sigo con vida, espero que
dentro de pocos meses volvamos a ser seres humanos consecuentes con nuestro
destino. Seamos de nuevo capaces de llevar una vida digna y tener el empuje
suficiente para buscar soluciones a nuestro desastre actual.
La solución será la de nuestra
gente emprendedora, o no será.
Nunca los políticos han hecho
nada para que la gente sea más emprendedora. Siempre premiaban a los que
medraban alrededor suyo y despreciaban a los que se querían hacer una vida
propia, al margen de ellos.
No existe hemeroteca alguna que
diga lo bueno que crearon los políticos. siempre administran lo que otros
crean. Nuca son capaces de dar algo a la sociedad. Siempre piden que la
sociedad les de todo a ellos, con el fin de hacer o no hacer algo a nuestro
favor o en contra nuestra.
Cada día nos levantamos con
nuevas normas de cómo seguir vivivendo nuestra puta vida de conciudadanos masocas.
Siempre nos quieren freir a
multas.
Siempre nos legislan en contra de
nosotros. Nunca en contra de ellos.
Son intocables. No se les puede
juzgar. No se les puede replicar. No se les puede insultar.
Ellos nos pueden juzgar,
replicar, insultar y menospreciar siempre y en todo momento.
Cuando meten en la cárcel a un
político es que es tan grande lo que ha hecho que no pueden esconderlo.
Si les metieran en la cárcel (
Dado el inmenso número de actos delictivos que todos cometen), tendrían que
sacar a todos los delincuentes habituales que las llenan. Solo estarían llenas
con los políticos que deben de ser juzgados y condenados por sus fechorías.
Nunca podemos estar relativamente
tranquilos. Un día son 4 los que han delinquido, otro día son 8. Al siguiente
son 16. Pero al cabo de unas horas ya tenemos a 32. Y así, hasta el infinito y
más allá (Como los juguetes de Toy Story).
Ahora sin bromas : Es muy
preocupante que a las alturas que estamos del siglo XXI aun no hayamos
conseguido tener claro lo que nos espera en los siguientes tres o cuatro años.
Los que dirigen la economía, los
que dirigen la política, los que dirigen a las clases obreras, los partidos
políticos, los que dirigen las empresas, los que dirigen nuestra vida en
general nos deben ya de decir a donde vamos.
No podemos seguir en la
incertidumbre de pensar que no saben todos ellos a donde van y a donde nos
llevarán. Son nuestros dirigentes y deben su vida y su forma de vivir a todos
nosotros, nos deben mucho y nos lo tienen que pagar, cuanto antes y sin quitas
ni cotas.
Nos deben mucho y nos han de
devolver todo nuestro trabajo para que podamos de nuevo vivir en paz y sin el
actual mal fario que existe.
Espero que más pronto que tarde
veamos todos el día luminoso que nos deben.
No podemos seguir mucho tiempo
más en esta infernal noche invernal en que nos han hundido.
Viva la vida estable y prospera
que nos espera, a pesar de ellos.
El abuelo cabreado
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