martes, 15 de mayo de 2012

QUE ES LO QUE NOS ESTA PASANDO ¿?

Si. Qué es lo que nos está pasando ¿?. No es una simple pregunta lanzada al azar. Es una constatación de lo triste del momento actual de nuestra civilización occidental. Unos seres humanos que dieron lo mejor de sí para conseguir nuestros mejores logros económicos y sociales. Expandieron su cultura hasta lugares ignotos y muy lejanos, logrando crear una cultura universal que beneficiase a todos los seres de nuestro planeta. Todo esto quedó como un beneficio común a todas las razas y credos en tiempos ya pasado. Hoy, la creación de nuevas metas, la inmejorable cultura de todos en concreto, ha sustituido a las personas que eran el centro de creatividad y esfuerzo en conseguir ser mejores cada día y conseguir avanzar en nuestro camino peregrino hacia la meta de ser mejores y de crear cosas nuevas para el disfrute de todos. Hoy ya no existe el individualismo creativo. Hoy todo debe de ser realizado en equipo y ser obra de muchos, sin que el individuo pueda ser genial, creativo, único, sin el concurso de todos los demás. De esta forma se han ido quedando amorfos todos nuestros pensamientos. Todas nuestras ilusiones. Todos nuestros más íntimos deseos. Hoy ya no es posible creer en algo y defenderlo. Todos tenemos derecho a discrepar y ser críticos, para adormecer la creatividad. Nuestra vida se ha transformado en una sucesión de fotogramas, más o menos teledirigidos por fuerzas ocultas y que nos dejan sin poder ni respirar. Todos debemos de pensar y ser como nos digan los que se han erigido en nuestros dirigentes. No existe conciencia individual. Todo debe de ser colectivo y hay del que discrepe. Será anulado, barrido, desterrado a los confines de la tierra. Como es que después de tener dos guerras mundiales y otras muchas más locales en el siglo XX, aún existen muchas confrontaciones bélicas actualmente, sin visos de que terminen en poco tiempo ¿?. Como es posible que dado el grado de avance de la humanidad estemos todavía anclados en las miserias de siglos anteriores ¿?. Tenemos una tecnología tan avanzada que nuestros antepasados nunca pudieron intuir siquiera. Pero de que nos está sirviendo todo ello ¿? No hemos mejorado en nada nuestra gran miseria humana. Cuando vemos que cualquier suceso ambiental, ecológico, económico, social o error humano da al traste con miles y miles de ideas de convivencia y de progreso de la humanidad, sólo nos queda que rezar para que salgamos del lado oscuro de nuestra humanidad. Actualmente se están dando todas las circunstancias para que la humanidad esté de nuevo en abierta confrontación de los unos sobre los otros. No es por las distintas ideologías. Es porque el ser humano es así de cambiante. Hasta hace poco todos deseábamos tener un mundo en paz y remontando los logros del pasado. Pero. Qué ha pasado para que en poco tiempo seamos depredadores de nuestros propios congéneres ¿? Habíamos logrado un grado muy alto de bienestar social, de trabajo para más o menos todos los habitantes, de tener una vivienda digna, de poder acceder a una educación rica en enseñanzas, de poder tener esperanzas en el futuro nuestro, de nuestros hijos y de nuestros nietos. Pero de pronto todo se ha venido abajo. Ya no es posible creer en un futuro mejor. Ya no es posible que mantengamos nuestro modelo actual. Ya no es posible pensar en un trabajo digno. Ya no es posible pensar llegar al fin de nuestros días con una dignidad humana. Ya no es posible atender a todos y cada uno de los habitantes de nuestro país en las alegrías, en la enfermedad, en el destino común de nuestra civilización. Hoy solo existe una idea básica : Resistir como sea para poder llegar a un momento de cambio de tendencia y poder de nuevo ser seres humanos con alegrías, tristezas, deseos y todos los emociones que podamos tener. Para ello debemos de soportar todos los ajustes, recortes, sacrificios y medidas inhumanas que nos piden. Estamos de acuerdo. Los primeros en ajustarnos el cinturón. Los primeros en hacer recortes en nuestra maltrecha economía. Los primeros en hacer sacrificios y en tomar conciencia de que debemos de reducir nuestra forma de vivir, de consumir, de gastar en cosas superfluas, hemos sido los ciudadanos de a pié. Pero es descorazonador que habiendo cumplido todos los pobres trabajadores, los pequeños empresarios, tenderos, autónomos, pensionistas, ahorradores, que conforman la gran mayoría de nuestra civilización, los que realmente mueven el mundo, con sus inversiones, con sus grandes fortunas, con su gran poder económico, político y militar, no hayan dado lo que se esperaba de ellos para solucionar todo el tema que nos atosiga sin descanso. Prima de riesgo, intereses bancarios, comisiones, gastos y más gastos en cascada, todo abusando de que nadie se puede defender de estos atropellos, en muchos casos de usura y de expoliación consentida. No existe justicia para poder detener estos abusos de poder. Abusos que han sido consentidos por todas las ideologías del arco político sean del país que sean. Cada vez es más nítido el proceso por el cual nos hundimos en la ciénaga. No existe voluntad clara para detenerlo y poder salir del embrollo en que nos hemos metido todos juntos. Existe una lucecita en el final del túnel. Pero no la queremos ver. Principalmente por las personas que por sus cargos en banca, en política, en lugares de decisión no están dispuestos a verla, por sus excesivas ganas de no perder nada por el camino hacia la luz. Deberían de pensar que aunque perdieran proporcionalmente igual que hemos perdido todos los demás, les quedaría siempre mucho más que a todos nosotros. Deberían poner todos sus recursos, empresas, cargos públicos, cargos privados, instituciones públicas o privadas, a trabajar. Creando millones de puestos de trabajo y dando un nuevo empuje a la creatividad, de forma que todos y cada uno de los ciudadanos podamos ser de nuevo seres humanos con nuestras posibilidades y nuestras obligaciones. Y también con nuestros derechos que ahora mismo ya nos han sido arrebatados por la crisis que nos asola. Qué es lo que nos pasa ¿?. No tenemos conciencia de que todo es culpa de nuestro egoísmo. Que solo pensamos en nosotros mismos y no vemos más allá de nuestras narices ¿?. Los seres humanos nos diferenciamos del resto de seres de la creación por nuestra capacidad de inteligencia y nuestra posibilidad de cambiar nuestra vida de forma racional. Pero en estos momentos no tenemos claro como conseguir ser de nuevo una civilización mejorada y con nuevos cauces para sostener nuestro futuro. Importaría que la clase política, la empresarial, la de creación, la de representación, la sindical, la que está inmersa en dar lo mejor de si misma para el bien del conjunto de ciudadanos, encontrara la forma de ponerse de acuerdo para levantar de nuevo nuestra sociedad. Además de nuestros prohombres deberíamos hacer un acto de entonar la mea culpa todos y cada uno de los habitantes de nuestro país. No es verdad de que nos hemos pasado un poco con nuestros deseos de tener todos los derechos y no tener ninguna de las obligaciones que ello entrañaba ¿? No hay más agua que la que hay. Decían nuestros abuelos. Una gran verdad. Nos acostumbramos a que nos prometieron la felicidad eterna con solo haber nacido en nuestra época. No era así. Todo lo que disfrutamos en nuestra época es consecuencia del trabajo, en muchos casos inhumano de nuestros antecesores. No es nada lógico que ahora nosotros, sin ningún tipo de esfuerzo, podamos disfrutar de todo lo por ellos conseguido. Solo es esfuerzo nos va a dar posibilidades de salir del presente problema. Todos a una debemos trabajar en conseguir salir de él. No es posible seguir siendo una parte del problema y seguir como si nada pensando que ya lo arreglarán otros. Todos debemos de hacer lo que podamos para salir con bien y conseguir volver a la senda del crecimiento y de la mejora de nuestra civilización Qué es lo que nos pasa ¿?. Porqué no nos dejamos de lamentar y pedir que no nos quiten nada ¿?. Levantémonos. Andemos. Consigamos ser de nuevo un pueblo en marcha, con ilusiones, con la necesaria serenidad para acometer nuevas gestas. No caigamos en la postración de muchos seres que se consideran los únicos perjudicados por la crisis. No es la solución dejarnos llevar por la melancolía, la angustia, la mala actitud de querer desaparecer de este mundo, la peor actitud de ser un pasota de todo y de todos, de creer que no han solución y que por lo tanto es inútil todo lo que podamos hacer. Hay que reiniciar de nuevo el ordenador, después de haberle hecho un resort. Pues esto es lo que debemos hacer. Pero hacerlo ya. Sin perder más tiempo en falsas lamentaciones. No conseguiremos nada manifestando nuestra repulsa a todo lo que representa nuestro modelo de vida. Si no actuamos y nos movemos en el buen sentido : iniciando de nuevo nuestra actividad creando nuevos caminos y nuevos vínculos con todos para que todos juntos salgamos de nuevo a la luz. Qué es lo que nos pasa ¿?. Todos lo sabemos. Pero nadie quiere saberlo y trata de ignorarlo. Gobierno, partidos políticos, sindicados, instituciones públicas y privadas, empresarios, trabajadores. Autónomos, todos y todos juntos saldremos. No lo dudéis. Lo más importante es que no nos metan en una discusión interminable. Que traten de ponerse de acuerdo unos cediendo y otros gobernando para todos. Los abuelos cabreados!

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