sábado, 12 de mayo de 2012

HASTA CUANDO NOS FREIRAN ¿?

Existe una voluntad para tratar de entender totalmente el embrollo en estamos metidos ¿?. No lo creo. Existe algo que nos condicione a ver claro en que estamos metidos ¿?. No lo creo. Debemos de esperar a que alguien nos lo explique ¿? No lo creo. Tenemos posibilidad de cambiar algo en nuestro país ¿?. No lo creo. Podemos tener confianza en nuestro futuro ¿?. No lo creo. Esperamos que nos digan que hacer con nuestra desastrosa economía, nuestra desastrosa política, nuestra desastrosa forma de vivir ¿?. No lo creo. Tal vez exista una posibilidad de volver a ser nosotros mismos. No lo creo. No lo creo porque todos los indicios es que estamos agotados como sociedad civil. No sabemos que hacer ni con nuestros políticos, ni con nuestros representantes sindicales, ni con nuestros educadores, ni con nuestros gestores de la sanidad, ni con nuestros genios, ni con nuestros trabajadores, ni con nuestros funcionarios, ni con nuestros bancos, ni con nuestros dirigentes sociales, económicos, industriales , ni con nuestros dirigentes espirituales, ni con nuestros servidores de seguridad, policías, ejercito, espías, ni con las ONGs varias, nuestro sistema de convivencia, nuestra forma de convivir, nuestra gran organización, cívica, laboral, sanitaria, educacional. Está todo más que arruinado. No podemos ni pensar en un reciclaje como de los desechos o basuras que generamos cada día. Cada día nos llenan de noticias que son muy poco edificantes. Es un proceso que llevamos aguantando desde 2.008. Nunca estuvimos tan informados de las malas noticias como en estos últimos cuatro años. Creíamos, muy inocentemente que este año 2.012 sería diferente, pero el gran deterioro que se produjo desde el 2.008 nos está ahogando sin posibilidad de poder respirar un poco de aire fresco que nos de nuevas posibilidades a nuestros deteriorados pulmones. Todo lo que nos sucede hoy ha sido la consecuencia de cuanto sucedió antes. Nadie se cree que remontaremos nuestra mísera condición de apestados. Ni se lo creen en la comunidad Europea, ni Estados Unidos de América, ni el Fondo Monetario Internacional, ni el Banco Mundial, ninguno de los organismos internacionales nos creen. Como nos van a creer si hemos estado como país mintiéndoles constantemente en los pasados ocho años de nuestra reciente historia ¿?. Quieren tenernos bajo control, bajo observación en la UVI internacional. Han sido demasiados engaños los que hemos lanzado, como si fueran verdades. Nunca un país estuvo tan bien hace ocho años y tan ruinoso ahora. Si el mismo dirigente nacional votado por los ciudadanos nos decía que estábamos habitando el país mejor del mundo, sin problemas, sin nada que nos enturbiara nuestra vida, tan bien cubierta de todos los problemas financieros, económicos, y políticos nos parecía el Pais de Alicia en el país de las maravillas. Pero en realidad estábamos en el país de la miseria y de la ruina total. Nos han despertado sin misericordia de nuestro sueño infantil. Nuestro futuro pasa por asumir lo que somos, lo que hemos sido y lo que seremos en un futuro muy incierto, pero que ya lo tenemos en nuestra vida cotidiana : no volveremos a ser el país de Alicia. La necesidad hace despertar los instintos básicos del ser humano. Por tanto, la necesidad nos hará más fuertes y nos preparará para la travesía del desierto que estamos cruzando ya. No existe otro método para llegar a ser un pueblo de nuevo con grandes esperanzas, grandes deseos, grandes gestas, grandes posibilidades de ser seres humanos estables, con una posibilidad de futuro para todos. Debemos de ser conscientes de que nada será como lo conocimos en los años 60, en los años 70, en los años 80, en los años 90, en los años 2.000. Pero si que con esfuerzo y poniendo todo nuestro empeño en ello, llegaremos a superar toda la mierda que nos han echado entre unos y otros a nuestra cabeza. Cuando un pueblo ha tenido que sufrir a los dirigentes que nos ha tocado tan mediocres, por no decir malvados, su único recurso para la supervivencia sale de la fuerza que como conjun to podemos ejercer y de esta fuerza saldrá una nueva forma de gestionar nuestros recursos y poder tirar adelante nuestra vida común. Cosas que no podemos tolerar más en nuestro futuro son sin duda alguna : Mantener una casta política que se ha adueñado de nuestras vidas, nuestras haciendas, nuestro trabajo, nuestra ilusiones, vuestro futuro, nuestra forma de convivir, nuestra idea de lo que es bueno y de lo que es malo, nuestra inteligencia natural, nuestra forma de pensar, nuestras posibilidades de crear un mundo sin rencores, sin estar pensando siempre como joder a nuestro vecino, a nuestro familiar, a nuestro amigo, a nuestro oponente político, a nuestro maestro, a nuestro jefe de la empresa en que nos pagan un sueldo por nuestro trabajo, a nuestro padre, a nuestra madre, a nuestros hijos, nietos y a todo el universo que nos rodea. Es vital que no seamos nuestros propios depredadores. La humanidad ha ido evolucionando gracias a las buenas personas que han existido. Las malas personas que existen hoy en día nos están hundiendo en una ciénaga sin fondo. Cuando alguna persona nos da esperanzas y nos destruye la esperanza. Que nos queda por hacer ¿?. Esto es lo que en los últimos ocho años nos han hecho : Destruirnos en nombre de que son nuestros representantes por haberles votado. Ahora debemos de soportar más impuestos. Más prohibiciones, más control, más organizarnos nuestra vida sin que seamos más humanos ni más personas libres, ni más consecuentes con nuestra existencia. Todos somos más pobres. Menos los políticos que están disfrutando de grandes ventajas, de grandes honores, de grandes cantidades de dinero, sea por jubilación, por tener otros altos cargos, estar metidos en organismos que no sirven para nada y que nos cuestan verdaderas fortunas a los pobres desgraciados que no tienen sueldo por no tener trabajo, los pobres jubilados que les reducen su jubilación con el engaño de subírnosla y al mismo tiempo subirnos los impuestos. Si la justicia divina existiera, todos ellos estarían ya sufriendo un castigo ejemplar. Pero tienen suerte. Solo se les podrá aplicar el castigo cuando dejen este mundo. Mientras seguirán disfrutando de todos los honores por habernos destruido nuestro miserable mundo de trabajadores, de pensionistas, de empresarios, de buenas personas, de creadores de algo tangible y hermoso como es nuestra vida y nuestra propia estima. Todo el mundo debería de ser consecuente y comprender como se ha gestado nuestro mísero futuro : Nuestros dirigentes, con su miserable inteligencia nos han conducido como una masa de borregos y se han aprovechado de nuestra confianza, tomando como suyo nuestro patrimonio, nuestros sueños, nuestro trabajo, nuestro pensamiento, nuestra forma de vivir, dejando vivir e intentando ser consecuentes y sobre todo siendo muy buenas personas, intentando no perjudicar a nadie y siendo nosotros mismos. Ahora nos dicen que todos debemos de colaborar en reconstruir lo que los políticos han destruido. Pero como ¿?. No nos han dejado ni aire para respirar. Ni dinero en nuestras cuentas bancarias, al nacionalizar unas instituciones han terminado por quedarse lo poco que nos quedaba. Las instituciones que no han sido nacionalizadas están a un paso de serlo. Todos los bancos, incluso los bancos que se han formado a través de las cajas de ahorros, están en la última pregunta. Pero el estado no puede dejarles caer pues entonces caería nuestro estado, nuestra nación, nuestra posibilidad de ser de nuevo algo bueno en el concierto internacional. Por ello el gobierno está legislando infinidad de medidas para tratar de aguantar el sistema financiero. Está entrando a saco en lo más interno de nuestros bancos, no deja nada sin mover. Da la vuelta a todo con la esperanza de que sea bueno para el país. Pero lo que más necesitamos es que más pronto que tarde se inicie de nuevo la actividad empresarial, económica. Que haya personas que compren y otras que vendas productos y servicios. En cuanto se inicie el proceso estaremos encaminados ya a una recuperación de nuestra economía. A una recuperación de puestos de trabajo. A una recuperación de nuestra vida común y sin distinción de personas dentro de nuestro país. Por más que las estancias comunitarias de Europa nos digan que debemos hacer, nosotros debemos de saber que debemos hacer sin tener que esperar que nos arreglen los demás nuestro estropicio. Somos una nación fuerte, con una historia muy fructífera, con una gran personalidad. No debemos de echarlo por tierra con nuestras mezquindades de pocos vuelos, intentando franccionar nuestra nación en 17 miniestados. Unido saldremos. Desunidos solo nos espera el caos y la desintegración consumiendo en ello lo poco que ya nos queda en común : Tenemos un espejo en que mirarnos. Yugoslavía funcionó bastante bien bajo la dictadura del Mariscal Tito. A su muerte se desintegró en varias naciones, como Serbia, Montenegro, Croacia, etc. Todos sabemos lo que ha pasado. No hace falta volver a decir que nunca más se ha de repetir en nación alguna su experiencia. Ahora tenemos el tiempo de la presente legislatura para tratar de arreglar los desaguisados de las dos anteriores legislaturas. No seamos locos y echemos por tierra esta nueva oportunidad que nos da la vida para crear y no destruir nada. Todos los ciudadanos debemos de ser una piña para conseguir superar las dificultades. Pero el principal problema es conseguir que los políticos sean buenos en su cometido y nos lleven por el camino del progreso, volviendo pronto a crear empleo productivo (no improductivo como fue en las dos pasadas legislaturas). En ello nos va nuestra propia supervivencia como nación. Todos los políticos deben de aparcar sus diferencias ideológicas y remar todos juntos en la dirección correcta, sin crear más problemas de los que ya tenemos actualmente y pensar más en los ciudadanos que en sus votantes, en sus partidos, en sus prerrogativas, en sus sueldos, en sus subvenciones, en sus prebendas, en sus coches, en sus choferes, en sus despachos, en sus secretarias, en sus cuentas corrientes, en sus grandes y lujosos viajes y tantas y tantas otras cosas superfluas que nos han hundido como país. Si todos juntos hacemos nuestra labor positiva saldremos. Pero si cada uno va por su lado poniendo trabas a los otros, no saldremos. Sería muy grave que dado el momento tan malo que vivimos, nuestros políticos ( de todas las ideologías) nos dejen a nuestro aire y nos metan en el cementerio del mundo, sin que podamos salirnos de él. Esperemos que sean suficientemente conscientes de que por el camino de la confrontación nos dan una vida miserable y sin salida. Cuando hablo de los políticos estoy incluyendo a los sindicalistas (que son unos seudopolíticos pues están inscritos en los partidos políticos y solo actúan con el beneplácito de éstos). No defienden a los trabajadores como sería su cometido. Es por los más de cinco millones de parados que digo esto. Cada día están pasando muchos problemas todos los que no tienen trabajo. Por lo cual nos llena de vergüenza que hayan políticos, sindicalistas, banqueros y otros muchos, que estén viviendo ricamente después de la gestión desastrosa que han realizado en estos últimos 8 años. Deberían de devolver a la sociedad todo lo que se han llevado. Sin necesidad de entrar en la cárcel, pues entonces aun les tendríamos que pagar casa, comida, traje, vigilantes, edificios de reclusión, y muchas cosas más. El Abuelo cabreado!

No hay comentarios: