Rescatista relata el frustrado operativo en mina San José
/ Lanacion.cl
La mina está completamente derrumbada en su último tramo, las condiciones de oxigenación son mínimas, la temperatura se vuelve abrumadora, y no hay señales de vida, revela un integrante del equipo de avanzada. “De acuerdo a nuestra evaluación y experiencia, el rescate para nosotros llegó hasta aquí”, asume.

Sábado 7 de agosto de 2010 | Actualizada 23:00 | País


Mina San José: La desazón de los familiares
“Dimos por terminada la tarea, no tenemos ninguna posibilidad de hacer nada”. Con estas palabras Daniel Palma, integrante de la avanzada de la cuadrilla de rescate que intentó el salvataje de 33 mineros atrapados en la mina San José, explica la dramática situación que se vive en el yacimiento ubicado a 50 kilómetros norte de Copiapó.
Palma relató a Lanacion.cl las labores del operativo de rescate por la chimenea, el procedimiento considerado más viable, pero que fue interrumpido por un nuevo derrumbe. Esto obligó a la detención definitiva de las faenas por esa vía, y la consiguiente constatación de que encontrar con vida a los trabajadores que permanecen atrapados es altamente improbable.
“Creemos que la posibilidad de que se encuentren con vida son escasas”, admite el miembro de la unidad de rescate minero del cuerpo de Bomberos de Chañaral y dueño de la empresa Atacama Limitada, que colaboró en el operativo.
La mina San José tiene 600 metros, pero ya a los 450 metros es “imposible seguir avanzando”, relata Palma. Los últimos metros del yacimiento están “completamente derrumbados”, justamente el sector del refugio donde estarían los mineros.
A esto se suma que las condiciones de oxigenación son mínimas, y la temperatura se vuelve abrumadora. “Entramos con equipos de medición de oxigeno que marcaban 19,1 por ciento. La normativa indica que bajo los 19 por ciento hay que entrar con equipo especial, de apoyo respiratorio (…) No hay ventilación, no hay circulación de aire y la temperatura es altísima”, revela.
“El cerro nos ganó, y por paliza”, admite Palma. De hecho, tras frustrarse este plan “A”, los rescatistas se retiraron del sector, y volvieron a sus casas, mientras las autoridades han declarado que se abocarán a delinear con especialistas una nueva alternativa técnica para el rescate.
Pero otras soluciones asoman como improbables. Palma señala que está la posibilidad de instalar un sondaje, que permitiría el ingreso de aire, y el paso de comida y líquidos, pero no la evacuación de los trabajadores. Para ello, sería necesario “pensar derechamente en hacer un nuevo acceso”. Sin embargo, esa es una alternativa que tomaría incluso meses, evalúa.
“De acuerdo a nuestra evaluación y experiencia, el rescate para nosotros llegó hasta aquí”, asume Palma. Un dato: en 2 días de trabajos de rescate no se han tenido señales de vida, cuestión que normalmente son detectables para estos equipos especializados en este tipo de operativos.