LA CORRUPCION DE ESQUERRA REPUBLICANA!

La corrupción suprema
Parece una broma que el debate sobre la corrupción en ERC haya empezado por el tan rocambolesco caso de un supuesto desvío a cuentas de este partido desde los fondos destinados a la construcción del circuito de Castellolí, en Barcelona. Un supuesto caso sobre el que, de cualquier manera, el fiscal ya ha pedido el archivo.


Parece una broma que, después de dos legislaturas en las que ERC ha usado descarada y descarnadamente todo tipo de recursos públicos para favorecerse y favorecer a sus amigos sin que nadie haya dicho nada hasta ahora, el debate surja con este asunto pequeño y absurdo que posiblemente no sea ni siquiera un caso.


Esquerra Republicana ha practicado fechorías mucho peores y aunque tal vez no constituyan, técnicamente, ningún delito, son clamorosamente inmorales y una total perversión del espíritu de servicio público. Nombrar a tu hermano embajador en París, sin que ninguna capacidad particular le haga merecedor del cargo ¿no es corrupción? Pues eso es exactamente lo que hizo Carod con su hermano Apeles.


Favorecer a medios de comunicación afines con subvenciones completamente desmesuradas no es, que digamos, usar el dinero público con demasiada decencia; y ahí están esos ocho millones de euros que, a instancia de ERC, la Generalitat ha regalado en los últimos seis años bajo concepto de subvenciones estructurales, y también a dedo, al grupo Cultura 03. ¿Una caldereta, Don Camilo? Venga!


Y qué decir de ese anormal que se bañó en la piscina de Pedro J. con el pasaporte en la boca. Era Joan Puig, diputado de ERC en el Congreso. No lo digo porque sea el director del periódico donde escribo, pero ¿no es absolutamente fraudulento utilizar el cargo de diputado de este modo? Que un diputado practicara aquel grotesco allanamiento de morada, ¿no es algo que va directamente en contra de lo que se espera de la clase política en un país libre y civilizado?


Escribe Oscar Wilde en De Profundis: «La corrupción suprema es la mediocridad». Hacerlo mal. Y Esquerra Republicana de Catalunya lo ha hecho mal. Muy mal. Una vez más, cuando ha tenido la ocasión de mandar, ha vuelto a hacerlo fatal. El prurito legal es importante, pero la corrupción no es sólo un tecnicismo, sino que abarca aspectos morales y de actitud. En este sentido, haber convertido a un analfabeto como José Montilla en presidente de la Generalitat por puro resentimiento social contra Convergència constituye mucha más corrupción -y mucho más peligrosa- que cobrar una comisión tontorrona o desviar unos fondos de aquí para allá.


Cuanto mayor daño causas a tu país, especialmente si sabes que estás causando este daño y persistes aún en tu maldad, mayor es la corrupción que practicas y mayor el escarnio público que mereces. Si la incompetencia y la zafiedad fueran delito, todos los cargos de ERC tendrían que ingresar sin fianza en la cárcel.


Aunque el juez encontrara algún indicio de financiación ilegal de ERC a través de los fondos destinados a construir aquel circuito, e insisto en que todo parece indicar que no va a encontrarlo, esa improbable corrupción sería anecdótica comparándola con la degradación y el desprestigio que Carod y los suyos han causado a Cataluña.

G. G. / Barcelona

La Fiscalía archiva la denuncia por el desvío de subvenciones a ERC
La Fiscalía Provincial de Barcelona ha archivado la denuncia de Manuel Rodríguez contra el presidente de la Federación Catalana de Motociclismo, Ángel Viladons, por haber desviado supuestamente dinero hacia ERC desde las subvenciones que recibía esta entidad deportiva. La denuncia se centraba en las actividades económicas de Viladons al frente de la Fundación Catalana por el Deporte del Motor, vinculada a la Federación, y de las subvenciones que le entregó la Secretaria General del Deporte para hacer y gestionar el Circuito Parc Motor de Castellolí (Barcelona).


Según la denuncia, parte del dinero que recibió esta entidad fue desviado hacia ERC, aunque tanto un juzgado como la Fiscalía han rechazado la acusación. La fiscal Rosana Lledó estudió la denuncia tras admitirla a trámite el pasado 3 de agosto y pidió a la Policía Judicial que investigase estas supuestas irregularidades recogidas en el escrito del denunciante.


Los agentes descubrieron que el Juzgado de Instrucción número 5 de Igualada había tramitado la misma denuncia a finales del pasado marzo y la archivó el 14 de abril, al no tener pruebas suficientes para acusar a Viladons. Varias fuentes indicaron que la fiscal archivó el caso tras comprobar las dos denuncias presentadas por el particular, tanto en el juzgado como en la propia sede del Ministerio Público.


La Fiscalía, que recibió ayer el informe policial sobre el caso que se tramitó en el juzgado, argumentó que la Ley de Enjuiciamiento Criminal especifica que el fiscal dejará de actuar «cuando exista un procedimiento judicial por los mismos hechos». Fuentes judiciales explicaron que en ningún caso se ha investigado a la formación nacionalista en estas pesquisas, pese a que en la denuncia del particular se aluda a ERC.


Por su parte, el conseller de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, negó ayer que la Fiscalía esté investigando el presunto desvío de fondos hacia ERC para construir un circuito en Castellolí. «Lo que hizo el Govern en 2003 es hacerse cargo de la construcción de un circuito que estaba a medias para el desarrollo económico y el impulso» de la zona, añadió Nadal.

MANUEL MARRACO / Madrid