Asesinan de brutal golpiza a su hijita de ocho meses
Ambos homicidas fueron detenidos. El salvajismo de los maltratos fracturó el cráneo de la menor sus extremidades y costillas
Yéssica González - noticias@laverdad.com - Valmore Rodríguez - 29/10/2010 00:01 29
El incesante llanto de la pequeña Yeskelis del Valle López, de tan sólo ocho meses de nacida, anunció que algo no estaba bien. Su pequeño y frágil cuerpecito no soportó la paliza que su padrastro Alexánder Calderón Herrera, de 21 años, le propinó sin compasión alguna. El hombre de origen colombiano la golpeó con sus propias manos y después con un objeto contundente hasta fracturarle su cráneo en reiteradas oportunidades. Sus brazos, piernas y costillas quedaron destrozadas, hasta llegar al punto de sacarle de raíz los dientes que apenas se asomaban en sus encías.
Su maldad no tuvo límites al perpetrar el atroz hecho ante la mirada cómplice de Gissel del Carmen López Madrid (26), madre biológica de la menor, quién permitió sumisamente el homicidio de la menor de sus seis hijos alegando que no sabía que la mataría.
Los "Monstruos de El Taparo"
El suceso ocurrió la mañana del miércoles en una habitación de la hacienda El Taparo en el sector 23 de enero parroquia La Victoria del municipio Valmore Rodríguez. Ambos fueron detenidos por la Policía científica y fueron denominados los "Monstruos de El Taparo".
Los resultados de la autopsia revelaron que la inocente agonizó hasta morir sin recibir atención médica alguna. A su lado estaba su hermano de dos años, quién también padeció la crueldad de sus verdugos, pero quién corrió con mejor suerte. Ahora permanece en la emergencia del Hospital Pedro García Clara de Ciudad Ojeda. Tiene sus piernas y costillas fracturadas y hematomas en todo su pequeño cuerpo. También perdió sus dientes.
Franklin Navarro, jefe de la Policía científica subdelegación Ciudad Ojeda, informó que un empleado de la finca llegó en horas de la tarde y se percató del cuerpo inerte de la pequeña en su cama y denunció el hecho de inmediato. "Ellos alegaron en primer momento que los niños se habían caído de la cama, pero tras las incoherencias en las declaraciones y nuestras investigaciones se logró determinar la participación de ambos en el delito y por eso los detuvimos con una orden emanada del Tribunal Segundo de Control".
Ambos fueron remitidos al retén de Cabimas. Se iniciaron las investigaciones para determinar si la pareja se encontraba bajo los efectos alcohólicos o sustancias psicotrópicas.
Relación mortal
En las puertas de este cuerpo de seguridad permanecieron familiares de la desnaturalizada madre, quienes aseguraron desconocer las razones que conllevaron a este homicidio. Manifestaron que la mujer tenía meses perdida de su casa sin dar razón de su paradero. Antes de irse abandonó a sus otros cuatro hijos en casa de su ex pareja. "No entendemos que pudo pasar. Jamás pensamos que sería capaz de hacer algo así", aseveró una prima.
La pareja de homicidas tenía dos semanas viviendo en la hacienda. El sujeto se dedicaba a ordeñar el ganado y la mujer al aseo del hogar. Un vecino, quién no quiso identificarse, aseguró que los maltratos hacia los niños eran comunes. Los gritos y peleas eran parte de la corta pero mortal relación de apenas dos meses de convivencia y tres de noviazgo.
Los vecinos de la finca aseguraron que en varias oportunidades presenciaron serias discusiones entre la pareja. Alegan que escucharon por varios días seguidos el llanto de los niños, pero nunca imaginaron la crueldad de los maltratos.
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